

Cómo no vamos a estar felices, si en este mes se ha multiplicado la devoción a la Auxliadora, expresado en el amor de nuestros niños y jóvenes. Se ha dado un buen testimonio de Fe, se ha sembrado una semilla que producirá buen fruto, y con esta fortaleza que viene de lo alto, tendremos premio para mucho tiempo.
Es posible que no se hayan dado algunas clases. pero lo que ha quedado e
n el corazón de estos muchachos y niñas, nadie lo podrá borrar, mientras que algunos conocimientos dejados de dar, se conseguirán mañana.









